Los veteranos del Inmemorial visitan «Enredado en mi cabeza»
EXPOSICIÓN SOBRE LAS PRENDAS DE CABEZA
Un entusiasta grupo de compañeros de la Hermandad de Veteranos visitamos el lunes 13 de noviembre la muestra titulada «Enredado en mi cabeza», expuesta en la Delegación de Defensa en la Comunidad de Madrid, que hace un recorrido por la historia de las diferentes unidades de las Fuerzas Armadas y Guardia Civil a través de sus prendas de cabeza. Los asistentes, capitaneados por el presidente de la Hermandad, coronel Enrique Botella, acompañado del vicepresidente Santiago Santos, el secretario Gerardo Hernández y el tesorero Ricardo Daura, fueron recibidos por el coronel jefe de la Delegación de Defensa, José Javier Fabón Zurita, y por el teniente Julio César Presencio Peña, creador, comisario y propietario de la exposición, que hizo de cicerone en el recorrido por las dos salas que componen esta interesante muestra sobre el origen y los múltiples usos de las prendas de cabeza que se utilizan en el ámbito militar.
Para componer esta curiosa, original y única exposición que existe sobre tan peculiar temática, el teniente Presencio se ha nutrido a lo largo de su vida militar de aportaciones desinteresadas de prendas reglamentarias, material procedente de aquellas personas, ya fueran militares o civiles, que las donaron para apoyar este meritorio empeño de resaltar la cultura de la vestimenta. La exposición ha sido un éxito continuo en sus trece años de deambular por una treintena de ciudades de toda España, habiendo sido visitada por unas 165.000 personas.
La exhibición, que no es una colección como tal, aunque lo sea en «stricto sensu», sino «un proyecto de difusión de nuestra cultura y de nuestra historia», según Presencio, cuenta con unas 400 piezas, entre gorras, boinas, siroqueras, chapiris, morriones, tarbuches, lepantos, solideos, tricornios, gorras de plato, de visera, montañeras y cuarteleras, cascos de combate… «piezas todas actuales y al mismo tiempo históricas que nos cuentan parte del devenir de los ejércitos y de nuestras tradiciones».
El teniente Julio Presencio exhibió su erudición con precisa gestualidad y mucho humor aportando numerosos datos históricos sobre diversos objetos de la exposición: maniquíes de época como el alabardero de la Guardia Real, el legionario romano o la reina Isabel la Católica ataviada con un elegante vestido hecho a mano; además de otras curiosidades ubicadas en el recinto, como la bandera de mochila, la corneta, una antigua bicicleta de la Guardia Civil, el bombo que se utilizaba para el sorteo del reclutamiento forzoso de los «quintos» en ayuntamientos y cajas de reclutas, el petate y el cetme, etc.
Completo e ilustrativo recorrido
Explicó la función principal de la prenda de cabeza, aparte de la estética o protegerse del sol y de otras agresiones en combate: «Distinguir a quienes representan», es decir, encuadrar a su portador en el gremio al que pertenece. Ejemplos puso el ilustre guía: el sombrero de la vieira es al peregrino como el capirote al penitente, el pañuelo de cuatro nudos al obrero, la corona que reconoce al rey, los laureles al emperador o «la bacía que identifica al más ingenioso e internacional de nuestros hidalgos».
«Son expresiones que denotan la importancia de estas prendas en nuestras vidas». dijo Presencio, y en honor a los asistentes mostró la boina de color tinto burdeos que identifica a la unidad militar más antigua de Europa «y bien podíamos decir que del mundo»: el Regimiento de Infantería «Inmemorial del Rey» nº 1, del que los presentes en la exposición nos sentimos honrados por haber pertenecido a sus filas y seguir hoy representándola en actos oficiales. El teniente fijó su origen en 1248, en «la mesnada creada por Fernando III el Santo para la toma de Sevilla».
La historia sobre la «mili», sobre el saludo militar, sobre el origen de expresiones como «El Freno», «chambergo», «mandar a la porra», «pasar la gorra» o «quitarse el sombrero» fueron didácticamente explicados por Presencio, que descubrió otras curiosidades relacionadas con las prendas de cabeza expuestas –como el origen del tricornio en el llamado sombrero de tres picos–, algunas pertenecientes a Jefes de Estado Mayor de la Defensa y de los ejércitos de Tierra, Aire y la Armada, así como diferentes uniformes de unidades como la UME, los de camuflaje, francotiradores, pilotos de combate, infantes de marina, buceadores de la Armada e incluso epis de protección NBQ como los utilizados durante la pandemia del coronavirus.
La exposición se explica mediante objetos que nos hablan de las bandas de música militar, de las escuadras de gastadores, de los alabarderos reales… Presencio trajo también a la actualidad a grandes personajes de la historia como Blas de Lezo, el Gran Capitán, los Reyes Católicos, Hermenegildo, Fernando III el Santo y su hijo Alfonso X el Sabio, Zumalacárregui, el II Duque de Ahumada, fundador de la Guardia Civil, etc.
Tras el completo e ilustrativo recorrido por las salas, antes de abandonar la exposición de la calle Quintana 5, los veteranos fuimos invitados por el coronel Fabón a su despacho para agradecernos la visita y ponerse a disposición de la Hermandad para participar en cualquier actividad cultural que lleve a cabo la directiva de los veteranos del Inmemorial, cuyo presidente, Enrique Botella, le agradeció en nombre de todos su cordialidad y el estupendo recibimiento de todo el personal de la Delegación de Defensa en la Comunidad de Madrid.
P. Fajardo (14-11-2023)